23 de Mayo
Nos levantamos a eso de las 9 hs y bajamos los 2 pisos que separaban nuestra habitación del salón para desayunar, el clima del hotel era de hostel, pero muy tranquilo, todos desayunaban con cara de haber dormido poco. El desayuno estuvo bastante bien, no muy surtido pero se podía comer lo q había sin limites.
A pesar de que era primavera, al ser una ciudad tan al norte de Europa, hacia mucho frio, asi que nos abrigamos bien y salimos a recorrerla, por suerte había sol. Caminamos en dirección al centro y empezamos a cruzar canales y recorrerlos sin rumbo fijo…en un momento, encontramos una lancha techada parecida a las del Tigre que daba una recorrida por los canales de casi 1.30 hs y nos subimos (Creo q salía 8 Euros por persona)
El recorrido por los canales fue muy entretenido, Amsterdam es una ciudad muy linda e interesante y que se aprecia mejor aun desde el agua. A medida que avanzábamos, el audio en varios idiomas relataba historias o informaciones con respecto las casas, puentes o edificios que íbamos viendo. Asi pasamos por la casa de Anna Frank, el Museo y la casa de Rembrandt, El Museo Van Gogh, el Rijksmuseum (Museo Nacional), el Barrio Rojo, el Barrio Jordaan, la Estacion Central, Nemo, el Museo Maritimo y varios lugares mas…
Despues del recorrido en lancha, que nos dejo en el mismo lugar donde habíamos subido, fuimos caminando en dirección a la Plaza Dam, recorriendo uno de los canales. Hicimos una parada breve en un Mc Donalds donde almorzamos liviano y seguimos, pasamos por el museo de cera Madame Tussaud pero no entramos. Llegamos a la Plaza Dam, que esta rodeada de varios edificios históricos, como el Monumento Nacional a la Liberacion, que rinde homenaje a los caidos de la 2da guerra Mundial, el Koninklijk (El Palacio Real) y Nieuwe Kerk, (Iglesia Nueva). Luego caminamos hasta la Estacion Central y si bien ya habíamos visto miles de bicicletas, nunca vimos tantas juntas como ahí. La Estacion tiene un estacionamiento de varios pisos con miles y miles de bicicletas. Si tengo que arriesgar un numero, no menos de cien mil…
De ahí nos dirijimos a la casa-museo de Anna Frank, la entrada sale 12 Euros por persona, luego de hacer una cola de 15 minutos entramos a la casa. Antes de recorrerla leimos el folleto que relata toda su vida y la odisea que vivio junto con su familia por casi 2 años hasta que los nazis los encontraron. La visita a la casa es imperdible, esta todo mantenido tal cual fue en esa época y es escalofriante ir avanzando por la casa e ir viendo manuscritos, fotos, ver las escrituras o fotos que Ella y sus hermanos hacían o pegaban en las paredes e ir viendo las indicaciones, relatos y hasta películas que se pueden ver en cada habitación que se recorre. No somos de ir a museos pero este valia la pena por lo que significa su historia y si bien salimos con la piel de gallina, es un lugar obligado si se esta en Amsterdam.
Despues seguimos caminando y nos encontramos con una feria de flores, donde vimos los famosos tulipanes, de tamaños enormes y muy lindos. De ahí fuimos al Museo de la Tortura, la entrada era relativamente barata (6 Euros). Ahí vimos diversos métodos de tortura de la Epoca de la Inquisicion, representados en muchos casos en piezas originales, tambien replicas y cuadros con dibujos de la época y explicaciones de los diversos modos de tortura y cuales se aplicaba según el caso. Cuando salimos de ahí, ya eran las 18hs y estaba refrescando bastante, a pesar de q estuvo soleado todo el dia, seguimos paseando un rato mas y casi a las 19hs nos tomamos el Subte hasta la estación de Duivendrecht, para buscar el auto q habíamos dejado el dia anterior. Al llegar, introducimos la tarjeta de crédito y si, la barrera se abrió y nos cobro los 11 Euros que habíamos entendido que podría llegar a salir. El plan era dejarlo escondido en algún lugar tranquilo, un par de horas, ya que de 0 a 9AM al menos en el barrio del Hotel, el estacionamiento era sin cargo y a esa hora dejábamos el Hotel rumbo a Fussen (Al sur de Alemania). El auto quedo en el único lugar que encontramos, a 2 cuadras del hotel.
A las 20.30hs estábamos de regreso en el hotel, donde nos cambiamos y casi a las 22 hs, mientras recién anochecia, empezamos a caminar nuevamente hacia la zona mas céntrica, paseamos un poco por la zona roja y consultamos precios (Solo por curiosidad!) El precio estándar por una chica es de 50 Euros. Luego de andar por algunos callejones ya no tan turísticos y después entrar en algunos sex-shops, empezamos a buscar algún lugar para cenar. No pudimos resistir de entrar a un Restaurant de Carne Argentina, un poco por curiosidad y otro tanto por que extrañabamos el asado Argentino.
Elegimos uno llamado La Brasa y lo primero que nos llamo la atención cuando entramos fue la música mexicana de fondo! Pero bueno, ya estábamos ahí y el olor a asado hizo que se nos haga agua la boca.
Si bien el asado que ofrecen es sin hueso, estaba buenísima, acompañada por chorizo, papas fritas y una ensalada muy completa que tenia hasta pepino y choclo. Acompañado por un tinto San Huberto, un vino que en Buenos Aires nunca tomamos porque es medio pelo, pero alla como era el único que había y con El completábamos el menú porteño, estuvo bien! Y todo por menos de 40 Euros!
Despues de eso, ya medios copeteados por el vino, nos fuimos a recorrer coffe shops para ver las famosas cartas con las opciones para fumar, pero no las encontramos, tomamos algunas cervezas en algunos de esos coffe shops, dimos varias vueltas mas por la ciudad y a eso de las 2AM, cuando la noche empezó a terminar y la gente empezó a irse, nos fuimos al hotel a dormir, ya que mañana teníamos un viaje de casi 900 kilometros. Al llegar al hotel y ver lugares cerca de la puerta, fui a buscar el auto, pero lo encontré con una multa que le habían hecho a las 23.30hs, a pesar de que varios autos tenían el ticket vencido, o de fechas anteriores, el único que tenia multa era el único auto extranjero, el nuestro, que tenia patente Italiana. Como ya tenia la multa, decidi dejarlo ahí, ya que en la multa figuraba la dirección donde estaba estacionado el auto, al menos no corria el riesgo de que me lo multen otra vez si lo ponía en otro lado. La multa era de 55 Euros, al dia siguiente veriamos que hacer, ya eran casi las 3AM y me fui a dormir.
